El tema del envejecimiento es uno de los más complejos de tratar, existen diversos factores que influyen en que las líneas de expresión se hagan más visibles en nuestro rostro.
Después de los 25 años, dependiendo de los cuidados de la piel, se puede perder lozanía y entonces la piel se puede ver marchita y esto sí es envejecimiento prematuro. Es lo mismo con las arrugas muy marcadas.
En algunas personas, el envejecimiento prematuro es debido a sus genes, en otras es totalmente al medio ambiente. Pero es la segunda causa la que ataca a la mayoría de nosotros, por lo que hay mucho qué hacer para controlarlo. Otros factores incluyen:
Sabemos que por la vida cotidiana, el trabajo, el hogar etc. es difícil lograr cumplir con todos los anteriores requisitos así que debemos buscar otras soluciones para que nuestra apariencia y belleza no se vea afectada, es el caso de este maravilloso e innovador producto usado desde los 90’s: el ácido hialurónico. Es una sustancia que se encuentra en nuestro organismo de manera natural puesto que forma parte de numerosos tejidos y órganos de nuestro cuerpo como los cartílagos o la propia piel.
A medida que nos vamos haciendo mayores, la presencia de esta sustancia va disminuyendo considerablemente y a los 50 años, por ejemplo, sólo nos queda un 50% de nuestro capital de ácido hialurónico. Esto provoca la pérdida de volumen y de firmeza y la aparición de arrugas, y por lo tanto el envejecimiento de la piel. Una de las principales propiedades es su gran capacidad para atraer y retener el agua. Por este motivo, su empleo en tratamientos cosméticos de aplicación tópica permite rehidratar en profundidad la epidermis de la zona tratada para que su aspecto sea más terso y, al aumentar su grosor y volumen, disminuyan también los surcos de la piel.
Las zonas más comunes en las que se aplica son:
El efecto del esta aplicación es de 6 meses, después de este periodo vuelve a su estado natural, sin presentar deformidades.
No presenta contraindicaciones, se trata es de reacciones inmediatas como:
Lo anterior desaparecerá pocas horas después de la aplicación, dependerá también del tipo de piel y sensibilidad de cada persona. La aplicación de ácido hialurónico no debe aplicarse a personas que padezcan algún tipo de alergia severa, en zonas donde exista un proceso inflamatorio o infeccioso ni durante el embarazo o la lactancia.